Contaminación del cielo debida a los aviones


Todos los días miles de aviones vuelan por la atmósfera de la Tierra, sin embargo se desconoce cuanta contaminación se produce debido a los gases que producen sus motores. Las emisiones de los aviones frequentemente se pueden ver en la atmósfera en la forma de una nube que el avión va dejando en el cielo.

En un intento de cuantificar esta fuente de contaminación relativamente desconocida un grupo de científicos de la NASA está realizando una serie de experimentos para medir las emisiones de los motores de dos aviones de investigación de la NASA, un Boeing 737 y un Boeing 757.

Durante un experimento de dos semanas un avión T-39 con instrumentos a bordo para medir la emisión de partículas pequeñas (llamadas aerosoloes) y de gases químicos de los motores del Boeing 737, va a volar detrás de él. Los datos obtenidos por el T-39 serán usados para estudiar cómo las emisiones de los motores del Boeing 737 se dispersan en la atmósfera y qué tan rápido lo hacen.

Por otro lado, desde la tierra un sistema basado en un rayo laser puede medir cuántos aerosoles se emiten por los motores. Las medidas de los aerosoles se pueden usar como trazadores para estudiar cómo el flujo de aire alrededor del jet, dispersa las emisiones en la atmósfera. Se ha probado que las emisiones de los motores de los jets afectan las concentraciones de vapor de agua y de aerosoles y que pueden afectar el proceso de formación de nubes y las concentraciones del ozono atmosférico. No obstante, hasta la fecha se han hecho muy pocos medidas de tales efectos.

También se medirán las emisiones de los motores, tanto del Boeing 737 como del Boeing 757, haciendo pruebas en tierra montando una sonda cerca de la parte trasera de los motores para medir cuántos aerosoles emite cada motor y sus tamaños relativos.

Los resultados de todos estos experimentos darán a los científicos resultados muy valiosos para tratar de entender mejor cómo las emisiones de los aviones están afectando nuestra atmósfera y cómo estas emisiones son dispersadas. Todas estas emisiones afectan la transparencia de la atmósfera y de ahi la visibilidad que tenemos de los objetos celestes, por lo cual será muy interesante poder cuantificar tales efectos.

Fuente: NASA news press release 96-33.


Esperanza Carrasco Licea
Diario Síntesis, 5 de marzo de 1996