El cometa Hale-Bopp


Hace poco mas de un año y medio, Alan Hale en Nuevo México e, independientemente, Thomas Bopp de Arizona, descubrieron el cometa que ahora lleva el nombre de ambos. Aun cuando Alan Hale ya ha observado alrededor de doscientos cometas, este es el primer descubrimiento para ambos. Al poco tiempo del descubrimiento quedó claro que este cometa podría ser de los mas brillantes en los últimos años.

El Hale-Bopp es un cometa periódico pero, dado que tardará tres mil años en regresar, esta será la única oportunidad que tendremos de verlo. El cometa Hale-Bopp es en este momento uno de los astros mas brillantes en el cielo. Su brillo alcanza magnitud -0.8, lo cual significa que el cometa es mas brillante que cualquier objeto en el cielo nocturno en estas fechas, con la excepción de la Luna, Sirio y Marte. Es decir que supera en brillo al Halley y al cometa Hyakutake, que nos visitó hace poco menos de un año. Hasta hace unos días era necesario madrugar para poder verlo unas horas antes de la madrugada (nosotros lo vimos a la cinco de la mañana hace un par de semanas), pero para comodidad de la mayoría de las personas, el cometa ya puede observarse al anochecer, cerquita del punto donde se mete el Sol. Las mejores fechas para ver al cometa son entre el 26 de marzo y el 12 de abríl. Posteriormente aparecerá la Luna, la cual dificultará un poco la observación del cometa, que irá acercandose al Sol. La cola del cometa será mayor en mayo o junio, justo cuando dejaremos de verlo al acercarse mucho al Sol. El cometa volverá a ser visible al amanecer a partir de julio. Aproximadamente en octubre se habrá alejado y dejará de ser visible a simple vista.

A pesar de su brillo, el cometa Hale-Bopp no se ha acercado mucho a la Tierra. El domingo pasado (23 de marzo) llegó a su punto de mayor acercamiento, al estar a 194 millones de kilómetros de distancia, es decir un poco mas lejos de nosotros que el Sol. Se cree que el núcleo del cometa es relativamente grande, de unos 40 kilómetros de acuerdo a las estimaciones mas recientes. Esta es una estimación ya que no es posible ver directamente el núcleo. En comparación, el cometa Halley, que ha sido visitado por sondas espaciales, resultó ser un objeto irregular de 8 por 8 por 16 kilómetros. Sin embargo, mas que el núcleo, el factor determinante en cuanto al brillo del cometa es la coma, la envolvente de gas y polvo que rodea al núcleo del cometa. Al acercarse al Sol parte del cometa se sublima (la sublimación siendo el proceso en el cual un material pasa directamente del estado sólido al gaseoso), creando la coma y la cola. Algunos cometas desarrollan varias colas, y en particular en el Hale-Bopp es posible observar dos colas, una de gas y otra de polvo. La cola del cometa Hale-Bopp, dificil de observar desde las ciudades, alcanza varios millones de kilómetros de longitud y abarca cerca de veinte grados.

En los últimos años el público en general se ha sentido decepcionado con las apariciones de cometas, como el Kohoutek en 1973 o el Halley en 1986. Si bien el Hyakutake, y ahora el Hale-Bopp, han puesto de su parte en cuanto a espectacularidad, tal vez valga la pena insistir en que es en realidad el desarrollo urbano el que ha venido a apagar a los cometas. Quien tenga la oportunidad de admirar al cometa Hale-Bopp desde algún lugar apartado de las ciudades podrá darse cuenta de la cantidad de detalles que se pierden en el brillo del cielo citadino, como por ejemplo la cauda de los cometas. Una buena parte de los astrónomos del mundo, reunidos en la Unión Astronómica Internacional, están en una lucha permanente por proteger la oscuridad del cielo y, de ser posible, lograr recuperar parte de la visibilidad nocturna en las ciudades, a través de un uso adecuado de la iluminación. Tal vez si este esfuerzo logra prosperar veremos mas cometas brillar como ahora vemos al Hale-Bopp.


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Esperanza Carrasco Licea & Alberto Carramiñana Alonso
Diario Síntesis, 25 de marzo de 1997