El pasado 19 de Diciembre falleció a los 62 años Carl Sagan, tal vez el astrónomo con mayor fama fuera de la comunidad científica. Criticado por algunos y alabado por muchos, Sagan logró penetrar a los hogares de millones de televidentes, principalmente en Estados Unidos, con la famosa serie de televisión "Cosmos" transmitida en México a principios de los 80s. La labor de divulgación de Sagan fué mas allá que esta serie y el libro del mismo nombre. En 1978 se hizo acreedor al prestigiado premio Pulitzer por su libro "Dragones del paraíso", y durante su carrera escribió un gran número de libros de divulgación, entre los que destacan "Vida inteligente en el Universo", "La conexión cósmica", "Murmuros de la Tierra", "El cerebro de Broca" y mas recientemente "Un pálido punto azul". En total publicó no menos de 500 artículos científicos y de divulgación.
Carl Sagan fue profesor de astronomía y ciencias planetarias, y posteriormente director del laboratorio de estudios planetarios de la prestigiosa Universidad de Cornell. Desempeñó un papel importante en el desarrollo de las expediciones Mariner, Viking y Voyager, que nos llevaron literalmente a otros mundos, por lo cual recibió varias distinciones a nivel internacional. Durante 12 años fue el editor en jefe de la revista científica Icarus, la mas importante en el área de la investigación planetaria. La carrera científica de Sagan fue notable, aun si no consideramos su enorme labor de difusión. Sagan fue un astrónomo prestigioso en una área frecuentemente menospreciada por otros astrónomos: la investigación del sistema solar.
Hay por lo menos tres aspectos importantes relacionados con la obra de Carl Sagan. El primero es su importantísima labor de difusión, en particular a traves de la serie de televisión "Cosmos". Si bien esta serie le dio fama, también dio pie a varios detractores que veian en el algo mas que interés científico. El trabajo de difusión que realizó Sagan fue honesto y particularmente importante ya que logró presentar la complejidades del Universo de una manera amena e inspiradora a millones de personas.
Un segundo punto es su interés en la búsqueda de vida inteligente en el Universo. Este es un tema que se presta al sensacionalismo e incluso a mal informar al público. Por esto mismo se convierte en tabú entre los científicos, que dificilmente pueden hacer prevalecer sus opiniones contra los inumerables reportes de OVNIS y visitas de extraterrestres verdes, practicamente todos infundados. Sagan planteó el tema tal cual es: existen miles de millones de galaxias, cada una con cientos de miles de millones de estrellas. Existen en el Universo muchísimas estrellas como el Sol. Se han descubierto planetas alrededor de algunas estrellas, evidencia de que la formación de planetas es algo común en el Universo. Los ingredientes restantes son poner un planeta con el tamaño adecuado a la distancia adecuada, y todo nos hace suponer que se dará la vida de la misma manera que se dio en la Tierra. Es inescapable que debe haber vida extraterrestre, e incluso que puede haber vida inteligente. Pero Sagan fue claro en afirmar que no ha habido pruebas verdaderas de contacto con "extraterrestres". De hecho Sagan estuvo posteriormente involucrado en el proyecto SETI, de búsqueda de vida inteligente extraterrestre, cuyo objetivo era enviar y/o captar mensajes de radio a civilizaciones que habiten en otras estrellas. Sagan supo abordar este tema a pesar de las críticas de científicos mas "puros" (o puristas) y sin perder a su vez el punto de vista científico.
La seguridad de que hay vida en otros mundos está apoyada en un curioso comportamiento de la naturaleza que ha quedado en evidencia recientemente y que puede parafrasearse de varias maneras: algún eminente astrónomo dijo una vez que lo que no está estrictamente prohibido por la física es obligatorio. Dos ejemplos serían la presencia de planetas alrededor de estrellas y la proliferación de la vida: la naturaleza no lo impide y por ello creemos que es generalizado. En el caso de los planetas ya hay evidencia a favor de su existencia generalizada. Por otro lado, las naves Pionero y Viajero llegan consigo el mensaje de la existencia del hombre en el Universo, como botellas lanzadas al inmenso oceano que es el espacio.