El cráter gigante de Vesta


El telescopio espacial Hubble no sólo se apunta al universo mas lejano sino también al mas cercano como lo es nuestro sistema solar. Recientemente gracias al telescopio espacial se descubrió un cráter gigante en el asteroide Vesta, uno de los asteroides mas grandes del cinturón de asteroides. El cráter es un eslabón en una cadena de eventos que se cree son responsables de la formación de una clase distintiva de pequeños asteroides asi como también de meteoritos que han llegado a la Tierra.

Los asteroides, a veces llamados planetas menores, fueron descubiertos a principios del siglo XIX por astrónomos buscando trazas del planeta "que faltaba", entre Marte y Júpiter. El mayor de ellos, Ceres, fue el primero en ser descubierto (por Giuseppe Piazzi en 1801). Su diámetro es de mil kilómetros es decir algo menos que un tercio del de la Luna (3476 kms). Vesta es el tercer asteroide en tamaño y en ser descubierto (por Olbers en 1807). A la fecha se conocen mas de cinco mil asteroides, de los cuales sólo una docena tienen una diámetro superior a 250 kilómetros. Los asteroides son particularmente importantes ya que se formaron al inicio del sistema solar y, por sus características, prácticamente no han cambiado su composición, dándonos por tanto valiosa información sobre las condiciones iniciales del sistema solar.

El cráter gigante recién descubierto mide 456 kilómetros y cubre casi por completo a Vesta cuyo diámetro es de 528 kilómetros. Si la Tierra tuviera un cráter equivalente proporcionalmente hablando, llenaría el Océano Pacífico. La importancia de este descubrimiento radica en que ofrece la oportunidad de estudiar los efectos de grandes impactos en objetos pequeños. Debido a que el asteroide Vesta tiene un diámetro pequeño y baja gravedad el cráter se parece a los pequeños cráteres observados en la Luna, los cuales presentan un pico central.

El inmenso cráter está cerca del polo sur del asteroide. Se cree que dicha ubicación no es casual sino que la excavación de tanto material de un sólo lado del asteroide habría causado una cambio del eje de rotación de tal forma que este se fijó con el cráter cerca de uno de los polos.

Aproximadamente 6% de los meteoritos que caen en la tierra son similares en composición mineral a la de Vesta. La composición se estudia por medio de técnicas espectroscópicas, las cuales se basan en detectar que luz es preferentemente absorbida o emitida por los diferentes elementos químicos de la muestra bajo estudio. Para esto se divide la luz del objeto en sus distintos componentes espectrales ("colores") formando lo que se denomina el "espectro" del objeto. El espectro de Vesta es distinto al de los demás asteroides mayores y por ello se ha llegado a la conclusión de que un número no despreciable de los meteoritos que llegan a la Tierra probablemente sean fragmentos que perdió Vesta. El cráter puede ser la fuente de muchos de estos meteoritos.

Por muchos años ha sido un misterio entender cómo estos fragmentos pueden llegar a la Tierra, en vista de que no podrían haber viajado directamente desde Vesta dada su localización en el cinturón de asteroides y la tendencia natural de todos los objetos de adquirir órbitas elípticas alrededor del Sol. Recientemente se ha encontrado que los asteroides "hijos" de Vesta están cerca de una zona caótica en el anillo de asteroides donde la fuerza gravitacional de Júpiter puede redirigir fragmentos hacia órbitas que intersectan la órbita de la Tierra.

Se cree que la mayoría de los meteoritos provienen de otros asteroides pero sus orígenes no pueden ser determinados. Las características minerales de estos meteoritos significan que Vesta es el único otro mundo además de la Tierra, de la Luna y de Marte de los cuales los científicos tienen muestras de un origen conocido. El descubrimiento de este enorme cráter por el telescopio espacial Hubble confirma que Vesta es la fuente de una fracción de los meteoritos que recibimos del espacio y que estos se formaron en una colisión que estuvo cerca de destruir a este planeta menor.


Esperanza Carrasco Licea & Alberto Carramiñana Alonso
Diario Síntesis, 21 de octubre de 1997

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